Zabaleta necesita plata fresca para la campaña. Los vecinos se quejan de que nunca están las filmaciones para resolver delitos pero sí las abultadas fotomultas.
En Hurlingham las cámaras de seguridad no andan como corresponde o si funcionan las autoridades no habilitan las filmaciones para resolver los casos. Lo que sí andan sin parar son las cámaras de fotomultas que llenan los bolsillos de la administración del Intendente peronista Juan Zabaleta.
La casta necesita hacer más caja para la campaña. Todo esto mientras la ola de inseguridad no se detiene. Las redes sociales están repletas de quejas de los vecinos sobre esta situación. “Ayer asaltaron a mi hija que vuelve de la facultad en el barrio San Alberto”, dice un vecino en las redes. “Cámaras no hay salvo para multas y los vecinos bien gracias”.
Lo que más enardece a los vecinos es que supuestamente se gastaron millones en dinero de los contribuyentes para instalar cámaras de seguridad pero cuando se reclaman las filmaciones para intentar esclarecer un delito no está el material. “En el vecino Morón se gastó 100 millones de dólares en cámaras y están en la misma situación.”
